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| Foto / fcbarcelona.com |
Recuerdo bien dos de los lemas de Rosell: “Tots som Barça” y “Transparencia“. Todos somos el Barça, era un lema con el que se intentaba convencer al socio y aficionado barcelonista, de que por fin llegó el momento en el que nadie sería menos barcelonista en base a su nacionalidad y sobre todo, de que por fin se acabarían los “-ismos”, es decir, el nuñismo, el rosellismo, el laportismo…
Rosell alcanzó la presidencia del Fútbol Club Barcelona consiguiendo un apoyo por parte de los socios como nunca antes se había producido. Tengo muy claro que los motivos de ese apoyo fueron el engaño y manipulación de los medios a los socios – es exactamente lo mismo que sucede en política -, mediante la difamación a la anterior junta directiva y la exaltación del: “Rosell fichó a Ronaldinho” – porque otro argumento no había… Bueno sí, se llegó a leer que Rosell y Guardiola eran amigos y votar por él, era perpetuar la continuidad de Guardiola, mientras que la razón por la que Pep demoraba su renovación con Laporta, era porque desconfiaba de él… (tristemente ahora no tengo enlaces a aquellas columnas, pero os aseguro que esto se dijo en los “grandes medios”) -, pero este es otro tema. Me quiero centrar en el Sandro Rosell Presidente del Barcelona y vuelvo al “Tots som Barça“.
Tots som Barça, el primer lema destrozado, nada más comenzar.
El deseo era “unir”, y la primera medida es ir a por la anterior junta directiva y cuestionar la Presidencia honorífica de Johan Cruyff “ya que los socios no lo habían decidido” – ¿a Bartomeu lo pusieron los socios Sandro? -. Basta realizar una pregunta: Entre todos los barcelonistas – socios y no socios – del mundo, ¿cuántos crees que tienen en buena consideración a Laporta y a Johan Cruyff?, yo en aquel momento hubiera dicho que al menos el 50% – o sea, millones de barcelonistas – tenían aprecio por ellos y no les agradaban las decisiones que se iban a tomar, por lo que desde el primer día, te has ganado la antipatía de millones de barcelonistas basándote en el otro gran lema: “la transparencia” – recuerda esto para el final -, para poder atacar a diestro y siniestro a la anterior junta directiva.
Obviamente esto no es empezar con buen pie. El propio Guardiola se atrevió a tomar partido en el asunto y hacer pública su inconformidad con la decisión tomada por Sandro Rosell, lo que provocó que muchos barcelonistas dubitativos, comenzaran a creer que eran ciertas las voces de aquellos que aseguraban, Sandro Rosell lejos de velar por el Barça, buscaba una revancha personal – y tanto… –
Tras las declaraciones de Guardiola, aquel tema se calmó, pero los errores fueron llegando de manera continua. Con una herencia inmejorable en lo deportivo y una progresión excelente en lo económico – insisto en que el club pasó de ser 7º en ingresos en 2003, a ser prácticamente el número 1 en 2010 y que la deuda fue heredada de la calamitosa época Gaspart -, lo que tocaba hacer era tener talante, mediar entre “laportistas” y “nuñistas“, dar todo el protagonismo a Guardiola y al equipo, y buscar fórmulas para que el club estuviera siempre en primera línea en lo económico, sin caer en nuevos e innecesarios ataques indirectos: “la situación económica es precaria y toca austeridad. Ahorro hasta en el tóner…” – recuerda esto para el final –
Echando a todo lo que huela a la anterior junta directiva …
No fue eso lo que se hizo. A la primera oportunidad de echar del club a un entrenador puesto por Laporta – Pujalte -, se le echó sin miramientos, a pesar de que el secretario deportivo de la sección de Hockey, Quim Paüls, no estaba conforme y fue la razón por la que dimitió. No fue éste el único despido con “olor a revancha”. Enric Masip, que era el Director Deportivo de la sección de Balonmano, también fue despedido del Barcelona de malas maneras, cuando la sección de balonmano vivía un muy buen momento en los últimos años.
Todo esto podría ser “casualidad” y no “revancha”, si no fuera porque hay más. En 2011 Luis Enrique abandona el Barcelona “B” y la lógica, tras el trabajo espectacular de Oscar García como entrenador del Juvenil “A”, debía llevarle al banquillo, pero sin embargo llega Eusebio y unos meses después se marcha a Tel-Aviv con Jordi Cruyff. El “cruyffismo” de Oscar, fue la causa de no poder progresar en el club, y lo mismo le sucedió a Sergi Barjuan, cuya trayectoria también se vio frenada y acabó dejando las categorías inferiores del club.
…y los que huelan a Guardiola
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| Foto / AFP |
Estos despidos. Estas salidas incomprensibles, tienen que ver con Laporta y Cruyff. Pero luego están las que tienen que ver con Guardiola, quien pasa a ser “enemigo público” desde el momento en que se atreve a defender a la anterior junta directiva.
Guardiola sale del Barça en el verano 2012 “porque está cansado” – quien quiera puede seguir creyéndose esa versión. Masip también salió del Barça sin hacer ruído por el bien del club, pero hoy ya sabemos que la directiva fue la culpable y él mismo se atrevió a apuntar, que Guardiola salió del Barça por las mismas personas -, y a partir de ese momento comienzan a suceder cosas raras – bueno, raras para el que no esté acostumbrado a estas personas, para el que sepa cómo actúan, ya se lo imaginaba -.
Lo primero es el ensalzamiento de Tito Vilanova, buscando disminuir la importancia de Guardiola en los éxitos del pasado. Comienzan a crearse columnas difamatorias en los medios de comunicación deportivos más importantes de Barcelona, asegurando que “Guardiola no quiso hacer el trabajo sucio“, “Guardiola tenía mucho ego“, “Guardiola no piensa en el Barça“, y la puntilla la pone Freixa con su: “Tito es mejor que Guardiola, sobre todo en el aspecto humano“.
Unos meses antes, Valdés ya anunciaba que no iba a renovar, pero es que además ni siquiera quiso Eric Abidal. Le dicen que en cuanto juegue un partido se le renovaría y tras jugar varios ofreciendo un muy buen rendimiento, no se le renueva a pesar del deseo del jugador y del barcelonismo, por ampliar su relación. Abidal, al igual que Keita, quien dejó el Barcelona justo la misma temporada en que se fue Guardiola, era uno de los jugadores más queridos por Pep.
sentarse a negociar. Finalizando la temporada, se incumple la palabra que se dio a
Pero no termina el asunto aquí. Resulta que poco después se hace público que el Barcelona tampoco renueva a Emili Ricart. ¿Sabéis con quién llegó al Barcelona? Pues con Guardiola. El fisioterapeuta tenía una relación extraordinaria con Abidal y con todo el vestuario barcelonista hasta tal punto que los jugadores mediaron para que se le renovara, pero la directiva dijo: NO, como también lo hizo con los ‘scouters’ – encargados de analizar a los rivales – Doménec Torrent y Carles Planchart, quienes decidieron irse con Guardiola al Bayern.
Siento que el artículo esté quedando tan extenso, pero todavía necesito extenderme más. Pete Mickeal, el fantástico jugador americano que siempre será leyenda de la sección de ‘basket’ barcelonista, padeció un tromboembolismo en 2011 que además de poner en riesgo su vida, nos hacía creer que sería el final de la carrera del jugador. No fue así, al igual que Abidal, consiguió volver y ser un jugador decisivo para que el Barça ganara títulos. Tristemente, a mitad de la pasada temporada, volvió a recaer de su problema de salud y el club, que también le había prometido renovar, vuelve a incumplir su palabra y no renueva al americano que, por supuesto, fue fichado por la Junta Directiva de Laporta.
¿Deseaba el barcelonismo todo esto?, ¿Tiene lógica?, ¿Se ha sido transparente y se ha buscado unir al barcelonismo con este tipo de decisiones? Yo creo que no. Yo creo que se ha hecho todo lo posible por borrar el olor a “pasado” importando entre poco y nada si las decisiones perjudicaban o beneficiaban deportiva y socialmente hablando.
Otras decisiones igual de polémicas fueron por ejemplo, la llegada de la publicidad a la camiseta asegurando que “era por una buena causa” con ‘Qatar Foundation‘, para dos años después pasar a tener ‘Qatar Arways‘ y que no suceda absolutamente nada, porque “lo que importa es el dinero” – recuerda esto para el final -. Tampoco sucedió absolutamente nada, cuando los ‘Mossos d’esquadra‘ descubrieron que los Boixos y Rosell habían firmado un acuerdo para volver al Camp Nou mediante la creación de esa ‘Grada de animació’ supuestamente festiva y saludable que vendía una Junta Directiva, que por activa y pasiva repitió: “No tener nada que ver con los Boixos”, a pesar de que el acuerdo ya estaba firmado antes de que Rosell fuera elegido como Presidente.
Personalmente, creo que con la mitad de todo esto, cualquier Presidente que no contara con los favores de los medios de manipulación masiva, saldría corriendo del club. Pero es que hay más. Y no voy a casos como el ningunear otras secciones deportivas del club, o hacer pagar a los niños. Vuelvo a lo meramente deportivo. A Zubizarreta se le ningunea, pero cuando toca buscar una “cabeza de turco” para el “caso Thiago”, le escogen a él, a pesar de que es Tito Vilanova quien hace las alineaciones y decide quemar físicamente a Xavi e Iniesta durante toda la temporada. ¿Fue Zubizarreta quien apostó por el fichaje de Neymar? No, pero todos dicen que es un inútil incapaz de fichar a un central…
Y ahora, llegamos al “RECUERDA ESTO PARA EL FINAL“. Tras exigir transparencia y “responsabilidades sociales”. Tras investigar hasta los tickets de las cenas de la anterior junta directiva. Tras presumir de que “ahorras con el tóner”. Resulta que “Neymar cuesta 57’1 millones y punto”. No explico nada a nadie. Aquí mando yo, y si alguien busca explicaciones es que busca desestabilizar al Barça como el tal Jordi Cases…¿no?
Seamos serios. Pienso en lo del “tóner” y en la posibilidad de que se hayan soltado sobre 100 millones de euros por un jugador que terminaba contrato este verano, y no sé ni cómo calificar el grado de jeta y desfachatez exhibida.
Mentiras, mentiras y más mentiras, desde antes de entrar pactando con los Boixos, hasta el final cuando seguimos esperando saber cuánto costó Neymar y de por medio pagando el pato Laporta, Cruyff, Guardiola, Zubizarreta, Ricart, Planchart, Masip, Pujalte, Paüls, Valdés, Thiago, Mickeal, Abidal, Oscar, Sergi y los que vendrán, si alguien no pone freno a este mandato marcado por el odio, en el que todavía nadie comprende, porqué Bartomeu es el nuevo Presidente del Club.
P.D: Me he olvidado de Estiarte y el famoso “cuando las cosas os vayan mal, luego no os quejéis”. Creo que no es necesario profundizar más, pero si alguien lo necesita, lo haré otro día.
Cristian Pulina 