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Foto / Agencia EFE |
Primero quiero ser un poco “aguafiestas” – para variar – y dejar claro, que si al “Tata” Martino se le ocurre decir algo así como “yo ya dije que jugando de esta manera ganaríamos 9 de cada 10 partidos”, estará mintiendo. Estará mintiendo, porque ante el Levante del Domingo jugó en el primer tiempo, y el resultado fue de 1-0. En la segunda parte, con el 1-1 de Tello conseguido en uno de los pocos errores defensivos en el posicionamiento del conjunto de Caparrós, el Levante pasó a ir por detrás en la eliminatoria y perdió completamente la cabeza, convirtiéndose en uno de esos equipos desordenados y sobre todo con las líneas “muy estiradas” que son los que vengo diciendo que están destrozando la Liga.
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Levante 1-4 Barcelona
Juanfran (P.P. min. 53), Cristian Tello mins. 60, 81 y 86
Porque la primera parte, a pesar de las muchas bajas de ambos equipos – que obviamente tienen mayor importancia en los locales, por la diferencia de recursos en cada plantilla… -, el Barça volvió a demostrar que su nivel competitivo no está “un poco lejos” de ser aquel que hace unos años nos permitía afrontar cualquier partido con la seguridad de que teníamos enormes posibilidades de vencer, si no “muy lejos“.
Cierto es, que el Barça con el lanzamiento de Pedro al poste nada más comenzar, una buena internada de Tello, otra llegada de Adriano y un lanzamiento de Messi, pudo adelantarse, pero muy poco control sobre el juego y las ideas muy confusas a la hora de escoger porqué zonas transitar con la posesión.
Así las cosas, el Levante aguantó el 0-0, fue creciendo y en una acción de estrategia se encontró con el 1-0. Puede seguir Martino hablando con la autoridad que quiera, pero la estadística empieza a ser brutal en contra de la defensa zonal, respecto a la realizada “hombre a hombre” con Guardiola y Tito Vilanova. Por lo menos son ya 8 los goles encajados de estrategia en lo que va de temporada y esto es tremendamente condicionante.
A partir de 1-0, el Barça se vino muy abajo. Daba la sensación de que los jugadores se deprimieron, como si no supieran que hacer, pero por fortuna llegó el descanso y seguramente el “Tata” Martino les dijo lo más coherente, lo que cualquiera en su posición debería decirles: “tranquilos, que esto va 1-0, son dos partidos y lo importante es pasar“.
Con más calma y paciencia, el equipo continuó dominando en la segunda parte y tuvo la fortuna de encontrarse lo que no se había encontrado en los últimos 143 minutos ante el Levante, la defensa adelantada ante la atracción de Messi, mientras Tello lanzaba un espectacular desmarque con el que comenzaba su show particular. Eso sí, no pudo marcar en esta primera ocasión, en la que remató de manera irresponsable – Pedro estaba sólo – y por fortuna el guardameta del Levante no supo blocar la pelota, provocando un rechace que derivaría en el gol absurdo de la noche por parte de Juanfran.
Con el 1-1, el marcador pasaba a estar de parte del Barcelona. Ese golpe anímico y el cansancio acumulado física y mentalmente, hicieron mella en un Levante que fue castigado hasta tres veces con la misma jugada: Atracción de Messi+Diagonal veloz de Tello.
Como digo en el titular, son dos maneras de marcar la diferencia. El mejor jugador del mundo y de todos los tiempos, con su calidad técnica única para conducir y colocar pases milimétricos, el canterano – vergonzosamente criticado por algunos (que al mismo tiempo son los que se atreven a criticar a aquellos que cuestionamos cualquier detalle que no nos gusta de Neymar, cuando la diferencia de coste, salario y regularidad de minutos, creo que es abismal ¿verdad?) – con una velocidad más típica de un atleta, que de un futbolista, porque aunque se comenta poco, no es nada sencillo aunar una buena calidad técnica como la de Tello – que no es sobresaliente, pero sí muy buena -, con una velocidad tan espectacular.
De esta manera se consiguieron tres goles, siempre con los mismos protagonistas en la asistencia y en el gol, hasta completarse el ‘Hat-trick‘ de Tello en goles y el de Messi en asistencias. El joven extremo dedicó el gol a su novia, actualmente embarazada, y posiblemente por esa razón se mostró tan obcecado con anotar – además de porque para una vez que juega, es normal que lo intente… – y si había comenzado torpe y dubitativo, terminó repleto de confianza y atreviéndose con todo.
Al final, el 1-4 del Barça, es justo por las ocasiones generadas, aunque engañoso por el nivel de juego del equipo cuando tuvo que intentar derribar “el muro“. Los factores importantes son que salvo sorpresa – intolerable – se ha conseguido el pase a semifinales, un resultado que permitirá dosificar en el partido de vuelta y tanto Tello como Messi, refuerzan su autoestima con el partido de hoy.
Vamos Barça
P.D: Estaría bien que para criticar a Tello, le dejen alguna vez jugar más de dos partidos consecutivos como titular. Lo que no se puede, es exigir a un chaval de casa, que salga en uno de cada diez partidos y marque las diferencias. Que la paciencia y defensa que se hace con otros jugadores, se haga también con Tello, Alexis, Pedro… porque si no es así, no estamos defendiendo al Barça, si no a quien nos interesa.